T. Cecilia Isabel Agudelo Aguilar
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Hija de 2 maestros singulares: mi madre con una vocación extraordinaria, quien me enseñó la esencia de la profesión; mi padre, un profesor de matemáticas por circunstancias pero quien la asumió con responsabilidad y admirable serenidad.
Entre 8 hermanos, la única docente. Comencé mi formación en el colegio Santa Inés, femenino, que me infundió hábito de lectura, piedad y técnicas de estudio en distintas disciplinas con mucho énfasis en la retentiva. A los 10 años, cuando estaba en 5°, les dije a mis padres “¡quiero ser maestra!, ¿eso dónde se estudia?”
Inmediatamente comenzaron los trámites en la Normal Nacional María Auxiliadora de Copacabana, dirigida por la Comunidad de las hermanas Salesianas, donde forjaron mi corazón de maestra, oficio que amo y valoro como mi lugar en el mundo y mi misión para la humanidad.
Luego ingresé a la Fundación Universitaria Luis Amigó, recibí el título de Licenciada en Pedagogía Reeducativa, hermoso pregrado pero sentí la necesidad de tener un área específica para ejercer la docencia; ya había ingresado a la Universidad de Antioquia y de allí me gradué en Educación, Español y literatura.
Simultáneamente estaba cursando estudios superiores en la escuela de la vida: ser mamá de 4 hijos ha sido una exigente, asombrosa y significativa labor que me preparó para afrontar el trabajo educativo.
Ahora sirvo alegremente en el Municipio de Medellín, Corregimiento San Antonio de Prado, y aunque el Programa para la Transformación para la Calidad Educativa me ha desacomodado e inquietado bastante, agradezco esta nueva oportunidad de crecimiento integral.
Espero poder aportar a mis compañeros maestros a quienes admiro y respeto, los aprendizajes que me ha proporcionado esta maravillosa aventura.